Darío quiso saber qué pasaba entre su hijo, Francisco, y Furia, y los terminó encontrando in fraganti en Gran Hermano. El jugador está inquieto por el vínculo que, desde el momento en que el joven ingresó a la casa, tienen Pancho y Juliana, que ahora pasó a «mayores».
Y al levantarse, en los últimos días, Darío se dio cuenta de que su hijo no estaba durmiendo en el lugar que lo venía haciendo y las especulaciones empezaron a crecer en su cabeza al punto en que pensó una estrategia para entrar al cuarto donde dormía Furia a fin de saber si estaba o no con ella.
Y después de un rato de reflexionar, de evaluar y evaluar, Martínez Corti encontró la excusa «perfecta» para entrar al cuarto. Fue al box de intercambio de cosas y retiró algunos pares de pilas para cambiar en los micrófonos. E hizo el simulacro de que se iba a encargar de eso.
Así fue como Darío logró ingresar al cuarto y ver, con sus propios ojos, que Francisco estaba despertando con Juliana, después de una noche de intimidad. Y, como «cara de pocker», el jugador aprovechó para hacer algunos comentarios a la nueva parejita que se formó en la casa.
DARIO SE LLEVO EL MAYOR DISGUSTO DESDE QUE ENTRO A GRAN HERMANO: DESCUBRIO A SU HIJO CON FURIA
«Se portó bien, eh”, “Ahora traeme el mate, Darío”, y “Más no puedo hacer… Para que (Pancho) te diera suerte, me lo traje hasta la cama”, le dijo Furia, con humor, a Darío, tras la noche de amor y pasión con Pancho, luego de que la jugadora deje atras su pasado amoroso con Mauro D´Alessio.
Luego, en el confesionario, solo, Martínez Corti expresó que especula con que el acercamiento entre su hijo y la jugadora más picante del reality show lo favorezca a la hora de acercarse, un pasito más, a una posible final, a sabiendas de que la jugadora tiene un fandom que voto en contra de todos los que ella quiere eliminar de la casa.