A partir del 1 de enero de 2025 se eliminará el Impuesto PAIS, tal como ya lo adelantó el Gobierno. De esta manera, el dólar tarjeta o turista podría quedar más barato. Sin embargo, desde el equipo económico están trabajando para poder mantener la recaudación por esta vía, por lo que no se descarta algún otro recargo para estos tipos de consumo.
El dólar tarjeta o turista es el tipo de cambio que rige para todas las transacciones (compra de bienes o servicios vía tarjeta de crédito o débito) en el exterior, incluidos Netflix o Spotify. Se trata de la suma del precio del dólar oficial, más un 60% conformado por el Impuesto PAIS (30%) y la retención de 30% en concepto de anticipo de Ganancias.
Fin del Impuesto PAIS: qué pasará con el «dólar tarjeta»
Tal como está previsto en la ley que lo creó, el impuesto PAIS se elimina definitivamente el 31 de diciembre y desde el Gobierno ya anunciaron que no continuará vigente.
Sin este tributo, el dólar tarjeta -que es el más caro y este lunes opera a $1584– tendría una fuerte caída y estaría más cerca de los financieros, que rondan los $1200.
En concreto, lo que se está evaluando es sumar alguna percepción adicional sobre Ganancias o Bienes Personales para reemplazar el porcentaje que se recaudaba con el Impuesto PAIS.
«No está definido del todo, pero no va a caer el dólar tarjeta», señalan desde el ministerio de Economía. En ese sentido, todavía queda saber cuál será el porcentaje que se aplicará para reemplazar al Impuesto PAIS, que es del 30%.
Más allá de un fin recaudatorio, también hay una preocupación puertas adentro del Gobierno por la pérdida de reservas. Este lunes marca la fecha de corte para que la Argentina muestre el cumplimiento (o no) de la meta que impuso el FMI.
La consultora Aurum consideró que todo apunta a que no se alcanzará el objetivo, que establecía una acumulación de reservas netas por u$s8700 millones desde el nivel del 10 de diciembre de 2023. Los cálculos de esa casa de Bolsa -con datos al 12 de septiembre- indicaron que al BCRA todavía le faltaban unos u$s2000 millones para llegar al nivel previsto.
En tanto, la consultora LCG coincidió en que llegar a la pauta establecida por el FMI para fin de mes parece difícil. Además de la mayor presión importadora y la baja estacionalidad de las exportaciones, el BCRA tendrá que pagar u$s167 millones de capital del Bopreal serie 2. A eso se suman compromisos con organismos internacionales, a los que en septiembre hay que cancelar u$s465 millones en capital y u$s340 millones en intereses.
Dólar «barato»: crece el éxodo de turistas al exterior
Una baja en el dólar tarjeta podría profundizar el déficit en la balanza turística, que volvió a profundizarse en agosto, cuando volvió a caer la llegada de turistas extranjeros y a crecer el éxodo de residentes hacia otros países. Se trató del quinto mes consecutivo con la misma dinámica, explicada en gran parte por el encarecimiento de Argentina en dólares, consecuencia a su vez del atraso cambiario.
Según un informe publicado por el INDEC, en el octavo mes del año arribaron al país 418.500 turistas extranjeros, un 17,5% menos que en agosto de 2023. En paralelo, fueron 513.700 los habitantes de suelo argentino que viajaron al exterior, representando un incremento interanual del 12,3%.
Desde abril el turismo emisivo viene mostrando importantes saltos anuales, a la par de que el turismo receptivo arroja sostenidos retrocesos desde entonces. Particularmente resalta el intercambio con Chile, para el cual esta tendencia se verifica desde marzo.
Durante el mes pasado, la cantidad de chilenos que llegaron a territorio nacional se contrajo un 38,1% anual, variación negativa solo superada por el -46,3% que arrojaron los uruguayos. En paralelo, la cantidad de residentes que atravesaron la cordillera pegó un salto del 81,3%; de este modo, el país trasandino pasó a ser el principal destino, desplazando a Brasil de este lugar.
Brasil en esta ocasión ocupó el segundo lugar, mientras que Europa completó el podio. El 55,7% de los residentes que viajaron al exterior lo hicieron por vía aérea; el 37,5%, por vía terrestre; y el 6,8%, a través de la vía fluvial/marítima.
En cuanto al turismo receptivo, Brasil aportó la mayor cantidad con un 32,3%, escoltado por Uruguay con un 17,1% y Chile con un 9,9%. El 57,2% de los turistas no residentes arribó a Argentina a través de la vía aérea; el 32,4% utilizó la vía terrestre; y el 10,4% restante llegó por vía fluvial/marítima.
Lo cierto es que, ante un dólar que luce atrasado y con precios internos que siguen subiendo en niveles elevados, se observa una caída en el turismo receptivo, mientras que crece el emisivo. Algo que podría potenciarse cuando se elimine el Impuesto PAIS en 2025.