Luego de superar una dura internación por un tratamiento antidepresivo, Benito Fernández se animó a más y aceptó luego de ser convocado para ser parte del Cantando 2024, el ciclo que este año conduce Flor Peña en América TV. A sus 64 años asegura que este es un año “bisagra” en su vida.
Hace poco el diseñador dio a conocer su última colección en un desfile, está por lanzar una cápsula con una marca deportiva. Feliz por este nuevo desafío, dio una reciente entrevista donde contó cómo se prepara y reveló que recibió recientemente un mensaje de Máxima Zorreguieta.
“Después de la internación voluntaria, necesitaba un paso intermedio: no estar solo. Entonces me aconsejaron ir a la casa de alguien con quien yo me sintiera cómodo”, contó Benito Fernández al asegurar que fue su amigo Diego Impagliazzo quien lo ayudó.
“No sólo es el recibimiento o cómo te atienden, sino también la contención que uno necesita en ese momento”, explicó el diseñador quien, más adelante, reveló que Máxima Zorreguieta lo sorprendió con un sentido mensaje.
“Se enteró ahora, cuando vino a Argentina por el cumpleaños 80 de la madre, y decidió ponerse en contacto conmigo. Me dijo que me deseaba lo mejor. Fue un mensaje súper cálido”, reveló Fernández.
“Es increíble que la Reina se haya tomado el tiempo para mandarme un WhatsApp. Ahí te das cuenta de lo que vale la gente, de su educación. Más allá de si se pone o no un vestido mío, que se haya tomado un rato para pensar en mí fue súper importante tras ese bravo momento que pasé”, agregó.
Por otro lado, contó cómo inició su relación con la Reina de Países Bajos hace ya veinte años. “Era y sigue siendo la mujer que me gusta a mí: trabajadora, amante de la moda sustentable, una mujer que atiende a su familia… De todo”, afirmó el diseñador que fue contactado en un primer momento por Martín, el hermano de Máxima.
“Se casaba y me llamó para que vistiera a Mariana Andrés, quien era su pareja, y a cinco amigas. A Máxima le gustó como las vestí a todas, y un día y tocó el timbre de mi estudio. Estaba en la entrada, y directamente la atendí», contó.
«Uno piensa que caería con secretarias y custodias, pero subió los dos pisos y se quedó esperando que terminara de atender a una clienta para una fiesta de 15 años. En ese momento le empecé a hacer los primeros vestidos para una gira por Latinoamérica”, reveló.