La bomba la tiró Kristen Stewart y sorprendió a todos. Y es que, la actriz contó que una vez le ofrecieron entrar a Marvel si ocultaba su vida privada. Pero lejos de quedarse callada, fue al hueso con su respuesta: “Me dijeron que si no salía con mi novia de la mano en público, haría una película de Marvel”, lanzó sin filtro.
La declaración no tardó en viralizarse. Stewart, que siempre se mantuvo firme con sus decisiones, no dudó en responder con contundencia: “No quiero trabajar con gente así”. En plena nota, dejó en claro que no le interesa ser parte de un mundo donde te piden que te escondas para encajar.
Durante años, Kristen eligió proyectos arriesgados, alejados de las grandes franquicias. Después del boom de Crepúsculo, se enfocó en el cine independiente y se rodeó de directores como David Cronenberg y Olivier Assayas. Pero el escándalo por Marvel la volvió a poner en el centro de la escena.
Por supuesto que todas las miradas apuntaron a la industria. Y aunque la actriz no dio nombres, dejó en evidencia que todavía hay reglas viejas que pesan. “No me interesa hacer algo que no me deje ser yo misma”, dijo firme. Y así, dejó plantados a los superhéroes.
Como si fuera poco, Kristen se encuentra trabajando en su debut como directora con The Chronology of Water, una película basada en las memorias de Lidia Yuknavitch. Mientras tanto, sigue apostando a historias personales, sin fórmulas ni disfraces.
La realidad es que el comentario de Marvel no pasó desapercibido. El nombre de Kristen Stewart volvió a estar en boca de todos, pero esta vez por plantarse frente a un sistema que sigue pidiendo silencio. Y ella eligió hablar. Como siempre, sin caretas.