La torta Pavlova es un postre clásico de la repostería internacional que combina una base crocante por fuera y suave por dentro, con crema batida y frutas frescas. Originaria de Australia o Nueva Zelanda (aún se disputan su creación), esta delicia fue nombrada en honor a la famosa bailarina rusa Anna Pavlova y es sinónimo de elegancia y ligereza.
En esta nota, te enseñamos cómo hacer una Pavlova casera perfecta, ideal para agasajar invitados o lucirte en una celebración.
Ingredientes
Para la base de merengue
4 claras de huevo (a temperatura ambiente)
200 g de azúcar
1 cucharadita de maicena (fécula de maíz)
1 cucharadita de vinagre blanco o jugo de limón
1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional)
Una pizca de sal
Para la cobertura
250 ml de crema de leche (nata para batir)
2 cucharadas de azúcar
Frutas frescas a elección: frutillas, kiwi, arándanos, maracuyá, mango, etc.
Paso a paso
1. Preparar el merengue
Precalentá el horno a 120°C y forrá una bandeja con papel manteca. Dibujá un círculo de 20 cm como guía.
Batí las claras con la pizca de sal hasta que estén espumosas.
Agregá el azúcar de a poco, batiendo constantemente hasta obtener un merengue firme y brillante.
Incorporá la maicena, el vinagre y la vainilla, mezclando con movimientos envolventes.
Colocá el merengue sobre el papel, formando un disco con bordes un poco más altos que el centro, como un nido.
2. Hornear el merengue
Llevá al horno durante 1 hora y 15 minutos.
Apagá el horno y dejá enfriar el merengue adentro, con la puerta entreabierta, al menos 2 horas o hasta que esté completamente frío. Esto evita que se agriete.
3. Batir la crema
Batí la crema de leche fría con el azúcar hasta obtener una textura firme pero suave.
Reservá en la heladera hasta el momento de armar.
4. Armar la Pavlova
Colocá el disco de merengue sobre una fuente.
Cubrí con la crema batida.
Decorá con las frutas frescas cortadas.
¡Y listo! Tenés una torta Pavlova lista para disfrutar. Ideal para ocasiones especiales, celebraciones o simplemente darte un gusto.
Consejos
No abras el horno durante el horneado para evitar que se baje.
Usá claras bien limpias, sin restos de yema.
El vinagre y la maicena ayudan a que el centro quede húmedo y esponjoso.
Prepará el merengue con tiempo: necesita enfriar bien antes de agregar la crema.