BOGOTÁ.- Países de todo el mundo expresaron sus dudas este lunes sobre la transparencia de las elecciones presidenciales del domingo en Venezuela -donde la autoridad electoral proclamó ganador a Nicolás Maduro- y solo algunos socios manifestaron su ilimitado apoyo al presidente reelecto para un tercer mandato.
En estos comicios estuvo presente una pequeña delegación del Centro Carter, que indicó no tener capacidad de realizar una “evaluación integral del proceso de votación, conteo y tabulación” como tenía previsto hacer la Unión Europea, excluida como observadora a finales de mayo.
Un panel de cuatro expertos de la ONU también acompañó la votación, aunque su informe es confidencial y solo será compartido con el secretario general Antonio Guterres. El gobierno de Brasil, que todavía no se pronunció al respecto, sigue de cerca la situación y para ello envió al ex canciller Celso Amorim, asesor especial y hombre de extrema confianza del presidente Lula da Silva.
Los datos de los sondeos daban como favorito al candidato opositor Edmundo González Urrutia. Aun así, Maduro le sacó siete puntos de diferencia a González, según el 80% de los votos escrutados, un anuncio que desató una marea de presiones internacionales.
Tras el resultado, las opiniones se dividieron, la mayoría de los países que se pronunciaron al respecto no reconocen el resultado fraudulento, estos son Perú, Uruguay, la Argentina, Chile, Costa Rica, Panamá, Guatemala, Ecuador, Panamá e Italia.
Siguiendo esta misma línea, otros países como Estados Unidos, España, Alemania, Colombia y Reino Unido pidieron un conteo trasparente de votos, mientras Bolivia, Cuba, Nicaragua, Honduras, China, Irán y Rusia felicitaron a Maduro.
El jefe de la diplomacia norteamericano, Antony Blinken, expresó su “seria preocupación” de que el resultado electoral anunciado en Venezuela no refleje la voluntad del pueblo, y pidió un recuento “justo y transparente” de los votos.
“Ahora que concluyó la votación, es de vital importancia que cada voto sea contado de forma justa y transparente. Llamamos a las autoridades electorales a publicar el recuento detallado de votos (actas) para asegurar la transparencia y rendición de cuentas”, indicó.
El jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell, también pidió este lunes a Venezuela que garantice una “total transparencia del proceso electoral, incluyendo el conteo detallado de los votos y el acceso a las actas de votación de mesas electorales”.
El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, también pidió “transparencia” en los resultados; exigió la publicación de los datos “mesa por mesa”, y que así se pueda “verificar” el recuento y que éste sea el que asegure “la voluntad de los venezolanos”, según dijo este lunes en una conferencia de prensa en Santander.
“Venezuela votó ayer masivamente a favor de una transición hacia la libertad. Hay buenas razones para creer que el resultado anunciado por el régimen no corresponde al voto del pueblo”, afirmó el líder del Partido Popular español, Alberto Núñez Feijóo, y exigió “una verificación del proceso, la entrega de las papeletas y la aceptación del resultado” por parte del gobierno.
El triunfo de Maduro generó tensiones internas en España. Este lunes, el vocero del PP en el Congreso, Miguel Tellado, acusó al presidente del gobierno, Pedro Sánchez, de ser “muy duro con los dictadores muertos” pero “muy sumiso y muy blandito con los dictadores vivos”. Sánchez no se pronunció al respecto de la elección todavía.
“Tengo muchas dudas sobre el desarrollo regular de las elecciones en Venezuela”, escribió en la red X el canciller italiano, Antonio Tajani, exigiendo “resultados que puedan ser verificados”.
El ministerio de Exteriores del Reino Unido dijo estar preocupado por las acusaciones de “graves irregularidades” y solicitó “la publicación rápida y transparente de los resultados completos y detallados”.
Por su parte, los gobiernos de América Latina se han dividido por el anuncio de la reconfirmación de Maduro como presidente de Venezuela por otros 6 años de mandato. La Argentina, Colombia, Costa Rica, Uruguay, Guatemala, Chile y Perú cuestionaron los resultados.
El presidente de la Argentina, Javier Milei, quien trató de “dictador” a Maduro, dijo esta mañana que su país “no reconocerá otro fraude” en Venezuela y espera que las Fuerzas Armadas venezolanas “esta vez defiendan la democracia y la voluntad popular”.
“Los datos anuncian una victoria aplastante de la oposición y el mundo aguarda que reconozca la derrota luego de años de socialismo, miseria, decadencia y muerte”, agregó. “Argentina no va a reconocer otro fraude y espera que las Fuerzas Armadas esta vez defiendan la democracia y la voluntad popular”.
El presidente chileno, Gabriel Boric, dijo que los resultados anunciados son “difíciles de creer” y exigió “total transparencia de las actas y el proceso, y que veedores internacionales no comprometidos con el gobierno den cuenta de la veracidad de los resultados”.
“Desde Chile no reconoceremos ningún resultado que no sea verificable”, agregó.
El canciller peruano, Javier González-Olaechea, anunció en X que llamará a consulta al embajador de Perú en Venezuela “ante los muy graves anuncios oficiales de las autoridades electorales venezolanas”.
“Condeno en todos sus extremos la sumatoria de irregularidades con voluntad de fraude por parte del gobierno de Venezuela. El Perú no aceptará la violación de la voluntad popular del pueblo venezolano”, escribió.
El mandatario de Costa Rica, Rodrigo Chaves, repudió “categóricamente la proclamación de Nicolás Maduro como presidente de la República Bolivariana de Venezuela, la cual consideramos fraudulenta”, en un mensaje difundido en X.
Para el mandatario uruguayo, Luis Lacalle Pou, “no se puede reconocer un triunfo si no se confía en la forma y los mecanismos utilizados para llegar a él”.
“Era un secreto a voces. Iban a ‘ganar’ sin perjuicio de los resultados reales. El proceso hasta el día de la elección y el del escrutinio claramente estuvo viciado”, agregó en su cuenta de X.
El canciller de Colombia, Luis Gilberto Murillo, pidió este lunes un “conteo total de los votos, su verificación y auditoría de carácter independiente” para “despejar cualquier duda sobre los resultados”.
“Venezuela merece resultados transparentes, certeros y apegados a la voluntad de su pueblo”, escribió en X el presidente de Guatemala, el socialdemócrata Bernardo Arévalo, quien también dijo haber recibido “con muchas dudas los resultados”.
Ayer los gobiernos de República Dominicana, Panamá, Costa Rica y Ecuador señalaron que “la voluntad del pueblo venezolano (…) debe ser acatada”, mediante un comunicado conjunto emitido poco después del inicio de las elecciones.
Los aliados de Maduro celebran los resultados
También se pronunciaron sin falta gobiernos afines al de Maduro, bajo cuyo mandato Venezuela se hundió en una aguda crisis económica y humanitaria que empujó al éxodo a más de siete millones de personas, según la ONU.
China, que mantiene unos estrechos lazos con Venezuela, felicitó este lunes a Nicolás Maduro por su reelección y apuntó que “está dispuesta a enriquecer la asociación estratégica” con el país latinoamericano, indicó un portavoz del Ministerio chino de Relaciones Exteriores.
También felicitó a Maduro el presidente ruso, Vladimir Putin, cuyo país es un aliado tradicional de Venezuela, y señaló que las relaciones entre ambos países “constituyen una asociación estratégica” y en que confía que estas se desarrollen “en todos los ámbitos”.
Irán también felicitó a Maduro. “Felicitamos al pueblo y al gobierno de este país y al presidente electo de Venezuela por el éxito en las elecciones presidenciales”, afirmó el vocero del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Nasser Kanani.
En América Latina, Cuba, Nicaragua, Bolivia y Honduras reconocieron el resultado y apoyaron a Maduro. “Hoy triunfó la dignidad y el valor del pueblo venezolano sobre presiones y manipulaciones”, celebró el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, en X.
A Maduro “nuestro Homenaje y Saludo, en Honor, Gloria y por Más Victorias”, lanzó el gobernante nicaragüense, Daniel Ortega, mandándole “nuestro abrazo de Siempre”.
El presidente de Bolivia, Luis Arce, saludó que “se haya respetado la voluntad del pueblo venezolano en las urnas”, mientras que ratificó su “voluntad de continuar fortaleciendo nuestros lazos de amistad”.
Xiomara Castro, mandataria de Honduras, felicitó a Maduro por “su inobjetable triunfo, que reafirma su soberanía y el legado histórico del Comandante @chavezcandanga”, el fallecido Hugo Chávez, quien lo ungió como su sucesor.
Hasta ahora, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, un histórico aliado del régimen chavista y cuya voz es probablemente la más esperada, no expresó su opinión al respecto, pero la semana pasada acompañaba con preocupación el desenlace de las elecciones.
En una conferencia de prensa la semana pasada, Lula reconoció estar “asustado” por los dichos del presidente venezolano en los que aseguró que podría haber un “baño de sangre” en caso de que la oposición venza. Su declaración marcó una distancia inédita con su par venezolano, con quien mantiene una relación de décadas, pero esta vez le respondió tajante: “El que se asustó, que se tome una manzanilla”, retrucó Maduro, lo que desató cierta tensión entre ambos países.
El asesor para Asuntos Internacionales del presidente brasileño, Celso Amorim, elogió ayer la “importante participación” de los electores y confirmó la intención del ejecutivo de esperar “los resultados definitivos”.
”Esperamos que sean respetados por todos los candidatos”, añadió Amorim, que se encuentra en Caracas desde el viernes pasado para observar las elecciones, a pesar de que el Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil había cancelado el envío de una misión de observadores en respuesta a las recientes críticas al sistema electoral brasileño expresadas por Maduro.
Agencias AP, AFP y ANSA
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