Lo de los Patios en Navidad es un descubrimiento. Ya no solo para los visitantes, sino para los propios cordobeses, que están disfrutando de las plantas de la época y de la decoración navideña que con mucho esmero han instalado sus cuidadores, pieza clave de la fiesta, que ya no se queda en mayo. El cariño y mimo que hacen que los Patios de Córdoba sean Patrimonio Inmaterial de la Humanidad se traslada al mes de diciembre y pone su granito de arena en dinamizar la ciudad por estas fechas y llenar de contenido el calendario navideño.
Los villancicos y coros hacen que los visitantes no solo entren dos minutos a ver las macetas y echar una foto, sino que se queden un rato más. Palmas y los clásicos navideños se han escuchado este domingo de la mano de los villancicos flamencos Malasiento y el coro Ritmo Sureste en los patios de Julio Romero de Torres, 15; Maese Luis, 4; Maese Luis, 9; Maese Luis, 22; Santa Marta, 10 y Juan Rufo, 19B, que han abierto este domingo de 11.00 a 14.00 horas para recibir a cientos de visitantes.
Ilusión y ganas
«Abrir el patio en Navidad me encanta, en las fiestas navideñas hay mucha nostalgia de la infancia y me gusta tener elementos navideños en el patio y que la gente lo disfrute como yo lo hago, es como un regalo que me hacen» dice Carola Reintjes, la cuidadora del patio de Julio Romero de Torres, 15, que admite que aunque abrir el patio estas fechas conlleva mucho trabajo tras los destrozos que causa el verano en las plantas, también «me relaja mucho e intento mantenerlo todo el año para mí».
Los villancicos flamencos Malasiento han ido tocando de patio en patio por esta primera ruta de fin de semana. «Esto es mágico, llevamos varios años y lo vivimos con mucha ilusión y muchas ganas«, expresa Rosalía, su cantante. Este grupo fue formado por Ángel Molina, que murió el 13 de enero de este año y «era el alma del grupo», por lo que el paso está siendo «un poco triste y con muchas emociones este año».
Una mujer hace una foto en el patio de Maese Luis 9. / VÍCTOR CASTRO
En el patio de Maese Luis, 2 ya habían entrado más de 300 personas en apenas la primera hora de apertura. Uno de sus principales atractivos es un espectacular diorama incrustado en una de las paredes del patio, hecho por su dueño, José Cruz, belenista y joyero. El belén, hecho de forma artesanal con materiales como corcho, poliespan y revestido de escayola, está ideado sobre un patio cordobés antiguo y le ha llevado a este artista muchas horas de trabajo, más de 1.100, para conseguir el acabado que tiene. En mayo lo cambia por unas figuras costumbristas. Tal es lo que llama la atención, que José Cruz asegura que se lo han querido llevar al Museo de Belenes de Mollina (Málaga), donde el único belén cordobés que se ha expuesto ha sido uno elaborado por él en 2016. Para este cuidador, si se sigue apoyando y publicitando la fiesta en Navidad, puede tener un mejor futuro.
En eso coincide Flori Ruiz López, la hija de Isabel López, dueña del patio de Maese Luis, 9, que afirma que la apertura de los patios «debería estar más desestacionalizada y abrir en diferentes épocas del año para que no sea todo una concentración en mayo». Flori asegura que esta apertura navideña genera «mucho interés y muchos visitantes», que le han expresado sus buenos comentarios: «La gente está encantada y muy agradecida, dicen que tenemos un arte muy especial y es una satisfacción enorme».
La siguiente ruta de patios que abrirá al público por Navidad lo hará el próximo jueves a las 17.00 horas en los recintos de Plaza de San Rafael, 7; Alvar Rodríguez, 11; Plaza de Las Tazas, 11; San Basilio, 20; Siete Revueltas, 1 y San Basilio, 44.