El Gobierno está convencido de que, esta vez sí, la inflación puede romper el piso del 3% y dirigirse rápidamente a lo más cercano al 2% posible. En los despachos oficiales, hay una mezcla de convicción y de necesidad de que eso suceda.
Javier Milei dio nuevas muestras de su plasticidad en las últimas jornadas. Pasó de denostar a regalar elogios a China. Y también dijo que va a defender al peso. «Les mando un saludo a todos los ‘econochantas’ modelo mandriles que predecían el dólar a $3.000, $5.000, $10.000 o que no tenía techo, acá estamos nosotros para defender el peso», se burló desde el escenario armado en el Parque Lezama.
Inflación del 2%: la nueva apuesta del Gobierno
En los últimos días, el Presidente apareció en público mostrando su faceta más política que de economista.
El jefe de Estado cree que la estabilidad cambiaria es clave para tener chances de robustecer su capital político en las próximas elecciones de medio término. No está dispuesto a seguir las recomendaciones del Fondo Monetario ni la de los consultores económicos, a quienes denosta por su apartamiento de la responsabilidad de la función pública.
Javier Milei y Luis Caputo, en busca de dólares
Luis Caputo tiene toda la responsabilidad de llegar al objetivo. El Gobierno necesita generar puentes de dólares hasta el 2025. Es la única forma de sostener la paz cambiaria y que la economía pueda resurgir.
Las últimas encuestas marcaron los límites que tiene el Gobierno para moverse en medio de la crisis.
Sin chances de contar con las divisas necesarias para empujar la actividad económica a una velocidad mayor, la clave será juntar los dólares necesarios para contener la brecha y dar certezas al mercado de que no habrá problemas con el pago de la deuda.
La fuerza del blanqueo superó las expectativas
El éxito de la primera etapa del blanqueo de capitales fue clave para encarar la nueva etapa. Ni el más entusiasta de las filas oficialistas pensó que se conseguirían más de u$s10.000 millones en cash, que abarrotan los tesoros de los bancos, refuerzan las reservas brutas del Banco Central, y que le dan nuevo impulso al objetivo de la Casa Rosada.
Y habrá más novedades.
Fuentes oficiales desmintieron a iProfesional que, en lo inmediato, el Gobierno cierre un acuerdo con el Banco de Basilea por u$s5.000 millones. Pero lo cierto es que «algo habrá».
Un conocedor de los despachos oficiales señaló que «si llevaron el oro a Basilea fue para acordar un repo (préstamo de corto plazo), pero no sabemos el momento en que se concretará».
Economía quiere despejar las dudas de los financistas sobre la liquidez, y el mensaje será que los dólares para cumplir con los vencimientos de enero y julio de 2025 van a estar.
Las dudas que surgen por lo que viene
El objetivo político del Gobierno choca contra la visión de la mayoría de los economistas profesionales.
Martin Rapetti, por caso, dice que el Gobierno enfrenta «riesgos» de que el plan no llegue a un feliz término hasta el próximo ciclo electoral. «Me cuesta creer que la brecha cambiaria se mantenga en los actuales niveles porque acá faltan dólares», determina.
Para evitar las presiones, Caputo tiene la obligación de continuar con los «puentes» de dólares.
Al blanqueo le seguirá la renegociación del swap con China, que vence a mitad del año que viene. Milei ya anunció un viaje a Beijing para enero próximo.
Otro ladrillo se pondrá con el «repo», aunque ahí será clave el costo que el Gobierno afronte para obtener ese crédito de corto alcance.
¿Cómo viene la inflación?
Las principales consultoras publicaron que la inflación de septiembre será inferior a la de agosto. Ferreres la estimó en 3,2% y Eco Go en el 3,5%.
Por primera vez en 90 días, la inflación de los alimentos terminó septiembre con un descenso respecto del mes anterior. Para las principales consultoras económicas, los precios de la canasta básica cerraron por debajo el 4%, e incluso pudieron acercarse al piso del 3% mensual.
La consultora Eco Go -dirigida por Marina Dal Poggetto y Sebastián Menescaldi- reveló en su último informe a clientes que la inflación de los alimentos fue del 3,4%, contra 4,2% de agosto.
De ahora en más habrá que monitorear qué hará el Gobierno para bajar ese nivel.
Lo más probable es que se pongan límites a las actualizaciones de las tarifas y al resto de los precios regulados, como en el caso de los combustibles. De hecho, este mes ya decidió una rebaja de las naftas del 1%.
¿Alcanzará para marcar el sendero del 2% mensual?