InicioEspectáculosLicha Navarro atraviesa un momento muy duro: por qué está deprimido y...

Licha Navarro atraviesa un momento muy duro: por qué está deprimido y alejado de todo

Luego de animarse al Yo quiero ser de Paparazzi, de cortarse el pelo, de estrenar nuevo peinado y de sorprender con su rotundo cambio de look, Lisandro Navarro se subió al ring el pasado domingo 13 de octubre en el Luna Park y después desapareció por completo de los medios y de las redes sociales. 

Ante ese silencio virtual y el hermetismo en cuanto a su día a día, distinto a lo que acostumbra a mostrar, al recibir muchos mensajes pretendiendo saber qué le pasaba el ex Gran Hermano rompió el silencio y habló a través de sus historias confesando que no lo pasó nada bien.

“Recibí mensajes de todo tipo y algunos diciéndome cómo iba a entrenar así”, comenzó Licha refiriéndose a la fractura que sufrió en uno de sus brazos en medio de La gran pelea y siguió: “Ir al gimnasio es entrenar la cabeza más que el cuerpo”.

“Estuve bastante bajón estos días y ahora les voy a abrir mi corazón y les voy a contar un poco por qué. El tema de preparación para la pelea fue bastante estresante, no podía hacer las cosas que más me gustan, como jugar al fútbol con mis amigos, por un tema de contrato. Si me lastimaba quedaba afuera de poder pelear y tenía que pagar una cláusula bastante cara”, detalló. 

SE CAYO… PERO SE VOLVIO A LEVANTAR

Desde el interior de su auto, Navarró se explayó: “Me gusta jugar al fútbol y al tenis. Lo que más amo en el mundo es eso y comer asado con mis amigos. Y estaba ese pensamiento de se termina la pelea y voy a poder hacer todo eso. Imagínense mi frustración cuando después de 3  meses preparándome, en la pelea recibo en el primer round una piña y se me acalambra el brazo”.

“Pensaba que era un calambre y resulta que se me desgarró el biceps, el antebrazo y se me cortó el tendón del biceps. En ese momento y con la adrenalina seguí peleando, terminé los otros dos round y cuando llegué de Telefé a la noche fui a la guardia y entré en llanto por la frustración de que se terminaba todo eso estresante y ahora se me vino esto. Una operación por delante”, sumó.

Finalmente, Licha lanzó: “La buena  noticia es que hay una chance de que no me tenga que operar. Estoy esperando los resultados. Estuve muy deprimido estos días, con ganas de llorar, se me viene una operación, tres meses de recuperación y hoy me levanté de buen humor y salí adelante”.

Más información en paparazzi.com.ar

Más noticias
Noticias Relacionadas